Gestión de la desilusión
Cuando tenemos un nuevo proyecto en mente, la creatividad, la ilusión y las ganas brotan de nuestros poros, y las emociones fluyen rápidamente, invitándonos a la movilización, al cambio, a hacer y deshacer, sintiendo que el tiempo se nos va de las manos.
Pero, ¿qué pasa cuando alguien nos pone el freno de mano de repente, invitándonos a la reflexión, al replanteamiento, o simplemente, inmovilizando nuestros proyectos, de forma repentina? Pues que en ese momento sentimientos de desilusión, frustración e incluso rabia y pena, pueden aparecer, provocando que dejamos nuestros proyectos de lado, aparcados por un tiempo, pulsados con el botón de pause , o algo peor, como abandonarlos.
Actualmente nos invitan a ser creativos, emprendedores, imaginativos, activos… pero, ¿cómo gestionamos la desilusión? ¿Qué hacemos con todas esas ideas, ganas y energías, que durante un periodo de tiempo sentimos tiradas a la basura?
Aprender a pulsar el botón de pause en vez del stop, a tener en cuenta los movimientos y tempos del entorno, no solo los nuestros, y provocar las oportunidades, son algunas herramientas que podemos poner en marcha para gestionar la desilusión y provocarnos el éxito.